Cuando se habla de inteligencia artificial (IA), la mayoría de las personas piensan inmediatamente en software: algoritmos avanzados, modelos de machine learning y aplicaciones inteligentes. Todo ello, es lo sexy de la IA.
Sin embargo, el hardware, que juega un papel crucial en la magia de la IA, es pasado por alto. Pero, sin una infraestructura técnica robusta, incluso el software más sofisticado se queda inerte por completo.
Para comenzar, los servidores y el procesamiento son la base de cualquier implementación de IA. Las empresas necesitan servidores de alto rendimiento equipados con procesadores potentes, que tengan múltiples núcleos. Desde luego que las características de procesamiento varían de acuerdo con cada proyecto específico. Deben ser trajes a la medida.
Estos servidores deben ser capaces de operar con grandes volúmenes de datos y realizar procesamiento intensivo, esencial para entrenar modelos de IA complejos. Además, las unidades de procesamiento gráfico (GPUs), son fundamentales para acelerar el entrenamiento de estos modelos, especialmente en aplicaciones de aprendizaje profundo. Las unidades de procesamiento tensorial (TPUs) también son útiles para tareas específicas de machine learning, ya que ofrecen ventajas significativas en velocidad y eficiencia.
Inteligencia bien guardada
El almacenamiento es otro pilar fundamental en la infraestructura de IA. Para manejar y acceder a los vastos volúmenes de datos que alimentan las aplicaciones de IA, se requiere de una alta capacidad para guardar información, utilizando discos duros (HDD) para el almacenamiento masivo y discos de estado sólido (SSD) para mejorar la velocidad de acceso a los datos.
La conectividad y las redes son igualmente cruciales. Las redes locales (LAN) deben ser de alta velocidad, preferiblemente con capacidades de Gigabit Ethernet o superiores, para permitir la transferencia rápida y eficiente de datos entre dispositivos y servidores. Además, es fundamental contar con una conectividad a Internet de alta velocidad para asegurar que la transferencia de datos y el acceso a recursos en la nube se realicen sin interrupciones, todo en función de lo que cada proyecto en particular realmente requiere.
Por otro lado, las empresas deben construir una infraestructura de red robusta, puesto que la comunicación interna y externa también necesita ser segura y confiable. Es por este motivo que tecnologías como la fibra óptica, para asegurar una transmisión rápida y estable de datos, se vuelven indispensables. Los routers y switches de alto rendimiento son también esenciales para gestionar el tráfico de datos de manera eficiente y asegurar que no se produzcan cuellos de botella que puedan afectar la operatividad.
Seguro y confiable
La ciberseguridad es también una prioridad absoluta. Las empresas deben implementar firewalls de próxima generación (NGFW) y sistemas de detección de intrusiones (IDS) para protegerse contra accesos no autorizados y ataques cibernéticos. Además, es crucial utilizar tecnologías de cifrado tanto en tránsito como en reposo para proteger la información sensible.
La confiabilidad de la red no debe pasarse por alto. Al implementar soluciones de redundancia, para evitar interrupciones en caso de fallos en la red, y balanceo de carga, para distribuir eficientemente el tráfico de red, se asegura la continuidad y confiabilidad del servicio.
Finalmente, ningún sistema está completo sin un sólido dispositivo de respaldo. Las soluciones de copia de seguridad y recuperación automáticas son esenciales para proteger los datos críticos y asegurar la continuidad del negocio en caso de cualquier eventualidad.
Como es posible observar, los “fierros” en la estrategia de IA de una empresa son básicos. Es vital desarrollar infraestructura técnica adecuada que soporte los requisitos de procesamiento, almacenamiento, conectividad y seguridad que estas tecnologías demandan.
Prepararse con estos requerimientos no solo facilita la implementación de soluciones de IA, sino que también asegura que la empresa pueda maximizar los beneficios de estas tecnologías con el objetivo de mejorar su eficiencia operativa y de abrir nuevas oportunidades para la innovación del negocio.
Por lo tanto, la próxima vez que pienses en IA, recuerda que detrás de todo gran software, hay un hardware poderoso haciendo el trabajo pesado.
Hyperconvergencia
En una tercera capa, toda infraestructura adecuada de hardware tiene que asegurar la capacidad de que las soluciones pueda consumir datos de otras plataformas y que también pueda entregar o distribuir información hacia otras plataformas.
Esta capacidad de interoperabilidad es crucial para la integración y el flujo eficiente de datos a través de diversos sistemas y aplicaciones, asegurando así una operación coherente y fluida dentro del ecosistema empresarial.
Existen dos vertientes principales para la implementación de infraestructuras hyperconvergentes (HCI): on-premise y en la nube (Cloud). La elección entre estos modelos depende de varios factores, incluyendo la madurez tecnológica de la empresa y los recursos disponibles.
Las pequeñas empresas a menudo optan por soluciones en la nube debido a que carecen de la madurez tecnológica necesaria y los ingenieros especializados en infraestructuras complejas suelen ser costosos. La nube ofrece una alternativa flexible y rentable, permitiendo a estas empresas escalar sus operaciones según la demanda sin la necesidad de inversiones significativas en hardware.
En el sector bancario, la situación es diferente. Las instituciones financieras con clientes muy maduros tienden a preferir infraestructuras on-premise para mantener sus datos bien guardados y seguros. La seguridad y el cumplimiento normativo son consideraciones críticas en este sector, y las infraestructuras on-premise ofrecen un control más directo sobre estos aspectos.
Además, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) en México debe autorizar el uso de soluciones en la nube, lo que añade una capa adicional de revisión y aprobación antes de que las instituciones bancarias puedan migrar sus operaciones a plataformas cloud.
La implementación de hyperconvergencia en el ámbito bancario requiere una evaluación cuidadosa de las regulaciones y las necesidades de seguridad. A pesar de los retos regulatorios, la hyperconvergencia ofrece beneficios significativos, como la simplificación de la gestión de la infraestructura y la mejora en la eficiencia operativa, lo que puede traducirse en una mejor experiencia para los clientes y una mayor capacidad de respuesta ante las cambiantes demandas del mercado.
Los Fierros de la IA: Un Pilar Indispensable para el Éxito Empresarial
Cuando se menciona la inteligencia artificial (IA), es común que la atención se centre en el software: algoritmos sofisticados, modelos de aprendizaje automático y aplicaciones inteligentes que capturan la imaginación. Sin embargo, el hardware es un componente fundamental, a menudo subestimado, que sustenta y potencia estas tecnologías avanzadas. Sin una infraestructura técnica robusta, incluso el software más innovador se vuelve inútil.
Infraestructura de Procesamiento: El Corazón de la IA
La base de cualquier implementación de IA reside en servidores de alto rendimiento, equipados con procesadores potentes y múltiples núcleos. Cada proyecto requiere una configuración de hardware personalizada, adaptada a sus necesidades específicas de procesamiento. Estos servidores deben manejar grandes volúmenes de datos y ejecutar tareas de procesamiento intensivo, indispensables para entrenar modelos complejos. Las unidades de procesamiento gráfico (GPUs) y las unidades de procesamiento tensorial (TPUs) son elementos clave para acelerar el entrenamiento de modelos, especialmente en aplicaciones de aprendizaje profundo, ofreciendo ventajas significativas en términos de velocidad y eficiencia.
Almacenamiento y Conectividad: Garantizando la Accesibilidad y la Velocidad
El almacenamiento de datos es otro componente esencial. Las organizaciones deben contar con sistemas de almacenamiento que puedan gestionar vastas cantidades de información. Los discos duros (HDD) ofrecen soluciones para el almacenamiento masivo, mientras que los discos de estado sólido (SSD) mejoran la velocidad de acceso y recuperación de datos. La infraestructura de red también juega un papel crucial. Las redes locales (LAN) de alta velocidad, con capacidades de Gigabit Ethernet o superiores, son necesarias para la transferencia eficiente de datos. La conectividad a Internet de alta velocidad asegura un acceso rápido y sin interrupciones a recursos en la nube, ajustándose a las necesidades de cada proyecto.
Para una comunicación interna y externa segura y confiable, es esencial una infraestructura de red robusta. Tecnologías como la fibra óptica garantizan una transmisión rápida y estable de datos, mientras que routers y switches de alto rendimiento gestionan el tráfico de datos de manera eficiente, evitando cuellos de botella que podrían comprometer la operatividad.
Seguridad y Confiabilidad: Prioridades Indiscutibles
La ciberseguridad es una prioridad ineludible en cualquier estrategia de IA. Las empresas deben implementar firewalls de próxima generación (NGFW) y sistemas de detección de intrusiones (IDS) para protegerse contra amenazas cibernéticas. Además, es esencial el uso de tecnologías de cifrado para proteger la información tanto en tránsito como en reposo. La confiabilidad de la red se asegura mediante soluciones de redundancia y balanceo de carga, que previenen interrupciones y distribuyen el tráfico de manera equitativa, garantizando la continuidad del servicio.
Un sistema completo también debe incluir soluciones robustas de copia de seguridad y recuperación de datos. Estas medidas son fundamentales para proteger la información crítica y asegurar la continuidad operativa en caso de incidentes.
Hyperconvergencia: Integración y Flujo Eficiente de Datos
La interoperabilidad es crucial para la integración y el flujo eficiente de datos entre diversas plataformas y aplicaciones. La elección entre infraestructuras hyperconvergentes (HCI) on-premise y en la nube depende de varios factores, como la madurez tecnológica y los recursos disponibles. Mientras que las pequeñas empresas pueden beneficiarse de soluciones en la nube por su flexibilidad y rentabilidad, las instituciones financieras suelen preferir infraestructuras on-premise debido a la necesidad de un control más riguroso sobre la seguridad y el cumplimiento normativo. En México, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) impone requisitos de residencia de datos y autorización previa para el uso de servicios de cómputo en la nube, lo que puede representar una barrera para la innovación y aumentar los costos operativos (IMCO) (IMCO).
Conclusión
Los «fierros» de la IA son un pilar esencial para cualquier estrategia tecnológica empresarial. La implementación de una infraestructura adecuada no solo facilita la adopción de soluciones de IA, sino que también maximiza los beneficios, mejorando la eficiencia operativa y abriendo nuevas oportunidades para la innovación. Detrás de cada gran avance en software, hay un hardware potente que lo hace posible. Es fundamental que las empresas inviertan en una infraestructura robusta y segura, garantizando así un futuro prometedor en el ámbito de la inteligencia artificial.